La educación a menudo es un tema de conversación muy recurrente en cualquier conversación entre amigos, familiares, en cualquier oficina o entre expertos en la materia y demás abordando muchas incógnitas como si es eficaz en los tiempos que existen, si el modelo es anticuado, o de otras cuestiones sobre las que se pone el punto de mira sin embargo nos encontramos con una paradojica realidad.
Un estudio realizado por el CIS ( https://www.epdata.es/datos/principales-problemas-espanoles-cis/45 ) identifico que la educación se encuentra fuera de los principales problemas de los españoles, situándose incluso fuera de los diez principales problemas que más preocupan a los españoles, se sitúa en la decimotercera posición superado por problemas más esperados como el empleo, problemas económicos o la corrupción, pero sorprende que se encuentre por detrás de problemas como el independentismo catalán o la inmigración, lo que me lleva a cuestionarme si realmente es más preocupante para usted querido lector si la inmigración supone mayor problemática en su vida que la capacidad o calidad de la educación que pueda recibir usted o sus seres queridos
La situación de la educación española, según diferente informes como el World Economic Forum o el famoso Informe PISA deja mucho que desear, situándose en cuanto a resultados por debajo de la media OCDE ( Organización para la Cooperación y Desarrollo) donde se encuentran los principales países mas desarrollados a nivel mundial y con los cuales nos tenemos que comparar, ya no es el hecho de ser peores en resultados matemáticos y lingüísticos, la educación va más allá de estos conocimientos. España también debe mejorar por ejemplo en educación financiera, según el Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum, España se sitúa a la cola de Europa en esta materia o en educación en valores.
Existen
diferentes modelos educativos que se pueden implantar, el modelo finlandés, el japonés,
el de Reino Unido, que sobre el papel y en sus países están ocasionando grandes
resultados, personalmente no debemos olvidar que la educación y la buena formación
de los individuos de un país es un motor de crecimiento para el propio país,
pero también tenemos que tener en cuenta la situación social y la mentalidad española, implementar directamente un modelo como el Holandés basado en la autonomía, no asegura ni garantiza que sea eficaz en nuestra sociedad.
Como conclusión global creo que está claro que la educación española debe cambiar, quizás no por
completo la típica relación un profesor y varios alumnos en sus pupitres
tomando notas de lo que se realiza en clase, pero si adaptar algunas serias modificaciones y
no solo didácticas sino sociales para impulsar la educación española a donde se
merece en un mundo cada vez más globalizado.
Esto de las prioridades también va según los medios de comunicación, que dedican muchísimos más minutos a otros temas, a menudo poco relevantes. Y encima mucha gente se informa por vías en las que se publica contenido basado en argumentos falaces, por ejemplo, los típicos memes para WhatsApp que pretenden ser graciosos y si se analizan un poco, no lo son en absoluto.
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